Mi vida era estupenda hasta que cumplí los 35. Me veía joven como siempre, los hombres me miraban por la calle y me sentía muy segura de mí misma. Todo iba sobre ruedas y pensaba que nada podría romper mi pequeña burbuja de felicidad. Entones ocurrió lo peor: después de dar a luz, mi piel comenzó a envejecer de manera acelerada. Mi cara adquirió un aspecto cansado, con manchas aparentes en toda la cara, arrugas en múltiples zonas y pequeños brotes de acné que iban y venían cada cierto tiempo. Antes de la aparición de mi hija Alicia, lo que más quiero en este mundo, cuidaba mucho mi piel y hacía ejercicio. Incluso me inscribí en cursos especiales de belleza facial para mantener siempre una apariencia joven. Pero una cosa es saber, y otra es hacer.
En los primeros años de cuidar a mi hija, no tuve tiempo para mí en absoluto. Alicia siempre estaba en mis brazos y comencé a descuidarme de manera progresiva. Primero comencé a olvidarme de utilizar protector solar por las mañanas, con el caos que tenía siempre en casa. Poco a poco, fui dejando la rutina de cuidado facial de lado hasta que un día me miré en el espejo y no reconocí a la mujer que estaba viendo. ¿Qué me había sucedido y cómo no me había dado cuenta antes? No tenía palabras para describir el claro deterioro de mi piel. Arrugas y pliegues por todos lados. Un color de piel que no proyectaba vitalidad, si no cansancio absoluto y poca alegría. Manchas en diversas zonas que conseguían que me vieran 10 años más mayor...
Entonces supe que tenía que hacer algo al respecto. Lo primero que hice fue retomar mi rutina de cuidados anterior de manera estricta. Seguí mi vieja rutina disciplinadamente durante meses, pero no consiguió devolverme mi anterior aspecto. Era obvio que los cambios que había sufrido mi piel eran más profundos, y no iban a desaparecer con una rutina básica de cuidados.
Fue entonces cuando me acordé de un tratamiento antiedad del que oí hablar en los cursos. La llamaban la crema todo en 1, por su supuesta eficacia para acabar con múltiples defectos de la piel en cuestión de semanas. El secreto estaba en la combinación de sus principios activos, según comentaban en el curso, lo que fomentaba la regeneración total de la piel facial. Recordé que contenía karité, progeline y ácido hialurónico en una proporción ideal, y conseguía incidir muy directamente y reducir al máximo las arrugas, manchas, acné y líneas de expresión causadas por la edad. Supuestamente, devolvía a las mujeres el aspecto joven que habían tenido años atrás y que tanto deseaban.
Decidí darle una oportunidad, dado que realmente no quería pasar por una cirugía estética, y me puse a buscarlo por internet. Pero la cosa no fue sencilla. No era capaz de recordar el nombre de esta crema, y había tirado los apuntes de los cursos que había realizado hacía años. Se me ocurrió llamar a Miriam, una vieja amiga que conocí en aquellos cursos, la cual había utilizado este producto en aquella época con resultados impactantes.
Ella aún conservaba un tarro de este potente tratamiento y aún lo utilizaba a diario, lo que le hacía verse mucho más joven que yo. Valkyrie Cream se llamaba. Pero había que pedirlo desde otro país y tardaba en llegar, dado que no vendían directamente en España. Me decidí a pedirlo y esperé pacientemente.
Según llegó, comencé a utilizarlo religiosamente por la noche hasta ver los resultados que tanto añoraba. Y no hizo falta esperar mucho: en una semana, el aspecto cansado de mi piel se había esfumado por completo; me veía como hacía 10 años, cuando aún conservaba mi piel radiante y mi alegría vital. Después de dos semanas, me sentía una mujer diferente: los hombres me miraban de nuevo por la calle, recibía cumplidos en cualquier lugar y mi confianza en mí misma estaba por las nubes.
Tal fue la positividad que Valkyrie trajo a mi vida, que me propuse contactar con el fabricante y traerlo a España para que cualquier mujer pueda sentir lo mismo que yo siento a diario. Contacté a la empresa por email, y me contestaron rapidísimo, el mismo día. Les pareció genial mi propuesta de traer Valkyrie a España, y me ofrecieron la posibilidad de darle la oportunidad a mis lectoras de probarla con un precio especial, ¡nada menos que un 50% de descuento! Se comprometieron a entregar los pedidos a mis lectoras con envío urgente en 24/48 horas, contra reembolso para que la comodidad de pedirlo fuera máxima, y por tan solo 24,95€ (el 50% del precio habitual).
Así que chicas, tomad nota de mi experiencia. Si deseáis volver a lucir una piel joven y sin imperfecciones, y recuperar el aspecto radiante que tanto atrae a los hombres y tantas cosas buenas trae, ahora podéis hacerlo. Podéis pedir Valkyrie Cream en el formulario que muestro más abajo: simplemente indicad la información de envío y recibiréis el producto a contra reembolso en 1-2 días. Si deseáis pedir directamente en la web oficial de Valkyrie con vuestro descuento aplicado, podéis hacerlo en valkyriecream.com/sara50
¡Espero que la disfrutéis y os ayude a alcanzar todas vuestras metas ! :)