Existen muchos factores que pueden causar el envejecimiento prematuro de la piel. Por lo general suele deberse a hábitos poco saludables en nuestro estilo de vida como una dieta poco equilibrada, el consumo de alcohol, el tabaco, tomar el sol en exceso y el estrés que acaban dando lugar a la formación de radicales libres que son los que causan el envejecimiento de nuestra piel antes de lo debido. Pero además a lo largo de los años pueden aparecer líneas de expresión que pueden acabar convirtiéndose en grandes surcos si no ponemos medidas para prevenirlas.
Para tener una piel tersa y joven por más tiempo es importante que le prodiguemos los cuidados adecuados antes incluso de que empecemos a notar los primeros síntomas de la edad. No hay que esperar a que salgan las primeras arrugas o sequedades para hacerlo. El envejecimiento de la piel va en función de cada persona, ya que depende tanto de su propia genética como de sus hábitos diarios. No obstante, no se recomienda empezar a usar cremas antiarrugas antes de los 30 años. Antes de llegar a esta edad, lo importante es usar una buena protección solar, ya que los rayos ultravioletas son uno de los principales responsables del envejecimiento de la piel, y una buena crema hidratante para evitar la aparición de las primeras arrugas.
Puede parecer que a los 30 años somos aún demasiado jóvenes para empezar a hacerlo, pero ten en cuenta que cuanto antes empecemos a proteger nuestra piel, más tiempo tendrá un aspecto liso. Si tu piel es muy seca, es probable que a esta edad ya empiecen a aparecer algunas arrugas, por lo que es importante ser muy constante para evitarlas. Si tienes la piel grasa, puedes empezar a usar crema antiarrugas más tarde.
¿Cómo elegir la crema antiarrugas más adecuada para mi piel?
Existen distintas cremas indicadas para cada tipo de piel y edad de la persona. Cada una de ellas contiene los ingredientes más adecuados para cubrir las necesidades específicas de cada piel. Por eso, antes de empezar a usar crema antiarrugas es importante que consultes con tu farmacéutico para que te recomiende la que mejor va para tu tipo de piel y para tu edad. Pero para que la elección te resulte más sencilla, a continuación te decimos cuáles son los factores que debes tener en cuenta:
Es el primer factor que debes tener en cuenta para elegir la mejor crema antiarrugas. Es evidente que la piel de una mujer de 30 años no necesita los mismos cuidados que la de una mujer de 50 años. Es por ello que debes elegir la más adecuada para tu edad.
En función del tipo de piel, también necesitarás un tipo de crema u otro. Las cremas antiarrugas contienen distintos ingredientes que actúan mejor que en unas pieles que en otras.
Las buenas cremas antiedad están fabricadas con ingredientes altamente eficaces para retrasar el envejecimiento. A la hora de elegir una en concreto es fundamental que te asegures de que contiene colágeno para dar flexibilidad a la piel, elastina para tener una piel tersa, ácido glicólico para restaurar la piel e hidratarla, antioxidantes que frena la formación de arrugas y AHA para dar luz al cutis y alisar las líneas de expresión.
¿Cómo aplicar correctamente la crema antiarugas?
Aunque las cremas antiedad ayudan a retrasar el envejecimiento de la piel y a tener un rostro joven y lleno de luz, si quieres conseguir resultados es fundamental ser constante, ya que estos no son instantáneos ni milagrosos. Las arrugas se van formando a lo largo de los años y no es posible eliminarlas de un día para otro. Por eso, te aconsejamos empezar a usar cremas antiarrugas lo antes posible, de manera que puedas frenarlas.
Pero además, uno de los factores que influyen en que la crema haga efecto o no, es su aplicación. Muchas mujeres cometen el error de aplicar la crema antiarrugas como si fuera una crema hidratante. Para aplicarla correctamente es importante tener en cuenta la dirección de la arruga. Por lo general, las arrugas parecen casi siempre en la misma dirección, por eso a continuación te damos los pasos que debes seguir para aplicar la crema antiarrugas correctamente y conseguir, de esta forma, los mejores resultados.